La organización tuvo para bien invitarme algunos días antes del evento, por lo que disfruté cuanto más pude de la ciudad y sus atractivos, en especial los gastronomicos... El resumen de ese tiempo es que Lima es una delicia (salvo por el clima) ...

Y en cuanto a la charla ofrecida, confirmé que digitalmente nuestras regiones (hablo de Colombia y Perú) se parecen mucho.

Sitios web mal organizados,  atrasados tecnológicamente y con construcciones y arquitecturas que dificultan el trabajo de todos los que los deberían sacarle provecho (interno y externo).

Como lo dije en la conferencia,  uno de los grandes responsables es la industria que ofrece servicios tecnológicos y otro obviamente el dueño del negocio de turismo. Igual no es letra muerta porque hay conciencia de las faltas cometidas, cada quien a su manera hace sus propios pinos y ve la forma de solucionarlos.

Aún en nuestros países estos son temas nuevos por el aceleramiento con que han llegado, masticarlos y digerirlos tampoco es fácil para pueblos que no son nativos digitalmente.. así que debo decir que vamos a nuestro ritmo,  pero señores: Hay que acelerar el paso...

Eventos como el Ematur despiertan el interés de los actores en hacer y tener mejores prácticas y acciones de mercadeo donde lo offline y lo online tengan brechas cada vez más reducidas.

En cuanto al discurso ofrecido,  cambié un poco la temática, siendo consciente que el grueso del público no era ni digital ni técnico, enfatice en generalidades del SEO y recomendaciones que los gerentes deberían solicitarle a sus proveedores tecnológicos, mejores prácticas.

Y dentro de eso, mi gusto por el cine me permitio crear una presentación donde películas y personajes fueron quienes con aire jocoso y al mismo tiempo didáctico explicaron con sencillez esos términos mínimos del seo.

Hubo 4 puntos claves en la exposición...

• Lo que sabemos
• Lo que deberíamos saber
• Lo que deberíamos hacer
• Y por último... la cruda verdad

....

Una charla divertida y útil que disfrute prepararla y goce más dictándola a los más de 200 asistentes.

Desde el aterrizaje me planteé la meta de volver a recorrer no solo Lima, dedicarle un largo tiempo a andar sus tierras, llenarme la panza con sus comidas y disfrutar aún más de la calidez y servicio que caracterizan al pueblo peruano, insisto, nos parecemos mucho (me refiero a Colombia) porque en muchas cosas buenas me sentí como en casa.

Gracias a los organizadores de Ematur, gracias al resto de conferencistas, y hasta pronto Perú.